El PP-A ha manifestado que la condena por parte de la Audiencia de Sevilla a UGT-A por fraude en subvenciones que se ha conocido este miércoles es «una prueba más del absoluto descontrol» de fondos públicos que imperó en Andalucía durante los gobiernos del PSOE-A.
En rueda de prensa, así se ha pronunciado el portavoz del PP-A en el Parlamento, Toni Martín, después de que se haya conocido que la Audiencia de Sevilla ha condenado a tres años de cárcel y a una multa de 50 millones de euros al exsecretario general de UGT-A Francisco Fernández Sevilla por un delito continuado de falsedad en documento mercantil en concurso con un delito de fraude de subvenciones, al destinarse fondos de la Junta para cursos de formación a «fines distintos».
«Se condena al sindicato como responsable civil subsidiario a devolver 40 millones de euros», ha añadido Martín, quien ha recalcado que con el PSOE-A en la Junta, el dinero público no tenía control. «Lo vimos en otros casos como los ERE o Invercaria, etcétera, etcétera», ha añadido.
Martín ha mostrado su preocupación por que esa sentenciado pone de manifiesto que «el dinero de los andaluces pagado con sus impuestos estaba en manos de personas que lo manejaban a su libre albedrío para conseguir beneficios en forma de conveniencias políticas».
«Esa es la realidad de lo que pasó en Andalucía durante 40 años», según el portavoz popular, quien ha señalado que, afortunadamente, la Andalucía de hoy, bajo el Gobierno de Juanma Moreno, «es muy distinta, y hoy el dinero público tiene control».
«Hoy nadie se lleva el dinero público como pasaba antes. Y hoy las discusiones en Andalucía y hoy las discusiones son en materia de gestión, no en materia de robo del dinero de todos los andaluces», ha agregado.
De otro lado, en referencia a la celebración del 41 congreso federal del PSOE este fin de semana en Sevilla, ha considerado «absolutamente vergonzoso que un partido político tan importante en la historia de España y de Andalucía, este fin de semana, se vaya a poner en pie, en pleno, ovacionando, aplaudiendo y reeligiendo como máximo dirigente a un señor que tiene imputada a su mujer por varios delitos, imputado a su hermano por varios delitos, imputado al que era su número dos por varios delitos, o imputado a su fiscal general»,
«Es una vergüenza que el PSOE reelija como máximo dirigente a una persona que está en esa situación», según Martín, que ha opinado que «estamos en el final del sanchismo, en los coletazos de una especie de régimen que se ha intentado imponer en España y que no tiene nada que ver con el respeto a la ley, con el respeto al Estado de derecho ni con el respeto a la separación de poderes».
