La Ermita del Parque Rústico Casablanca acogió el pasado domingo la tradicional verbena de San Antón. La jornada arrancó a las 11 de la mañana con una ruta caballista que corrió a cargo de la Peña Caballista de Benalmádena.
A su regreso, a las 13.00 horas, dio comienzo la bendición de animales, un acto en el que, un año más, predominaron los perros, pero también hubo gatos e incluso pájaros que volvieron a casa con su bendición y alguna chuchería de las facilitadas para ellos durante el día.
Posteriormente, se organizó una paella popular, con una barra a precios populares y después se dio paso a las actuaciones en vivo, que este año ha contado con Las Manuela, gypsy song, rumbas, flamenco y sevillanas.
En definitiva, una jornada festiva cargada de buena música, buena gastronomía y mucho amor por los animales.