El edil delegado de Agua y Parques y Jardines, Juan Olea, ha detallado que se ha procedido a una reducción histórica de consumo de agua potable en el parque de La Paloma, llegando a ahorrar hasta 70 millones de litros de agua desde 2023 con la puesta en marcha, por parte del gobierno de Juan Antonio Lara, de medidas para hacer frente a la sequía, como la de emplear agua regenerada en este emblemático enclave del municipio.
“Este ahorro de agua se ha logrado porque se tomó la decisión de incorporar agua regenerada aprovechando que el parque contaba con la autorización para su uso desde 2008 y, además, tenía la infraestructura”, destacó Juan Olea, quien lamentó que desde 2015 no se apostara por implantar esta medida por el anterior gobierno municipal, ni otras de previsión para hacer frente a futuras sequías como la que se ha producido en el último año.
Con esta decisión, subrayó el edil, “además de lograr ese ahorro de agua potable histórico que permite utilizar esos recursos para limpieza y regar otras muchas zonas verdes de la ciudad, se ha conseguido con este tipo de medidas y otras de otras delegaciones potenciar y mantener el Parque de La Paloma en buenas condiciones, pese a la sequía y las fuertes restricciones aplicadas en toda la provincia y otras de Andalucía debido a la ausencia de precipitaciones”.
Así, además de incorporar el uso de agua regenerada en su rutina de mantenimiento, el parque ha visto embellecidos varios de sus puntos con la instalación de un banco gigante como simpático rincón en el que fotografiarse y llevarse un recuerdo de Benalmádena y la transformación de una de sus fuentes en un estanque de nenúfares, plantas resisten las heladas del invierno y que vienen a completar la oferta de flora que ofrece este emblemático enclave del municipio.
