El otoño de 2024 fue el séptimo más cálido desde 1961, comienzo desde la serie histórica de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), y el sexto del siglo XXI. El organismo estatal ha avanzado que el escenario más probable para el trimestre de diciembre, enero y febrero también tendrá temperaturas superiores a lo normal en todo el país.
Así, AEMET ha indicado que el periodo entre el 1 de septiembre y el 30 de noviembre fue muy cálido. En la España peninsular, se alcanzó una media de 15,5ºC, lo que supone 1,1ºC por encima del promedio de esta estación en comparación con el periodo de referencia entre 1991 y 2020. En este aspecto, ha puntualizado que no se ha registrado ningún otoño con temperaturas por debajo de la media habitual desde 2010.
Por zonas, el organismo estatal ha detallado que el otoño tuvo un carácter extremadamente cálido en gran parte de la Región de Murcia, sur de la Comunidad Valenciana y en la costa mediterránea andaluza, mientras que resultó cálido o muy cálido en el resto de la España peninsular. En Baleares fue muy cálido. De esta manera, el archipiélago tuvo un promedio de 19,5ºC, mientras que en Canarias tuvo un carácter variable de unas zonas a otras, lo que resultó en conjunto muy cálido.
Por meses, AEMET ha especificado que septiembre fue frío; octubre, cálido; y noviembre tuvo un carácter extremadamente cálido con una temperatura media 2,8ºC por encima de lo habitual, lo que le convirtió en el mes de noviembre más cálido desde 1961, comienzo de la serie del organismo estatal.
En este aspecto, la agencia ha destacado que los episodios cálidos predominaron ampliamente. Entre ellos, ha puesto el foco sobre los que se produjeron entre el 29 de octubre y 11 de noviembre y del 14 al 21 de noviembre, con temperaturas muy altas para la época. A su vez, ha indicado que el día 8 de ese mes se alcanzó una máxima de 37,1ºC en La Aldea de San Nicolás (Gran Canaria), la más alta registrada en cualquier punto de España en un mes de noviembre.
Récord de lluvia en octubre
En lo que se refiere a lluvias, AEMET ha explicado que el otoño ha sido en su conjunto húmedo, con una precipitación media sobre la España peninsular de 236,5 litros por metro cuadrado (l/m2), el 118% del valor normal del trimestre en el periodo de referencia 1991-2020. En este marco, ha señalado que se trató del vigésimo otoño más húmedo desde 1961 y el séptimo del siglo XXI.
En buena parte del cuadrante nororiental peninsular la estación muy muy húmeda, así como en Cádiz, Huelva y algunos otros puntos del interior de la Península y de Galicia. Por el contrario, el otoño fue seco en Canarias, noreste de Baleares y de Cataluña, así como en zonas de Madrid, Extremadura, Castilla y León, País Vasco, Asturias y Galicia.
Por meses, el organismo estatal ha explicado que septiembre fue húmedo. Octubre tuvo un carácter extremadamente húmero y, de hecho, fue el más lluvioso de la serie histórica con unas precipitaciones cercanas al doble de lo normal. Noviembre, por el contrario, ha sido muy seco y las lluvias no han llegado ni a la mitad de lo habitual, lo que le ha llevado a convertirse en el segundo noviembre más seco del siglo XXI, tan sólo por detrás de 2004.
En este contexto, AEMET ha hecho referencia a la DANA y ha indicado que el 29 de octubre se produjo un episodio extraordinario de precipitaciones muy intensas que afectó al área mediterránea del este peninsular. Así, la presencia de una DANA y la llegada de vientos muy húmedos que atravesaron un Mediterráneo más cálido de lo normal derivaron, junto a otros factores más locales, en importantes sistemas tormentosos que afectaron a las provincias de Valencia, Cuenca, Albacete y Murcia. Según ha relatado la agencia, ese día también hubo lluvias muy intensas en la provincia de Málaga.
Por lo demás, también ha puesto el foco sobre las precipitaciones de intensidad torrencial que han tenido lugar a comienzos de noviembre en el área mediterránea. Entre ellas, ha resaltado los 144,2 l/m2 registrados el día 4 en Barcelona/aeropuerto, la cantidad más alta registrada en 24 horas de toda su serie.
Invierno cálido
De cara al invierno, el organismo estatal ha señalado que la predicción estacional para diciembre, enero y febrero muestra como escenario más probable el de temperaturas superiores a lo normal en todo el país, con mayor probabilidad en el noroeste y tercio sur de la Península, así como en los dos archipiélagos.
A su vez, ha indicado que el escenario más probable en cuanto a precipitaciones es el de que haya menos lluvias de lo habitual. En este aspecto, ha puntualizado que hay un 40 a un 50 % de probabilidades de que así sea, por lo que las incertidumbres del pronóstico son muy elevadas. No hay una tendencia clara para el extremo oriental peninsular y Baleares.
El portavoz de AEMET, Rubén del Campo, ha señalado que hay una probabilidad «nada desdeñable» de entre el 40 y el 70% de que el invierno está entre el 20% de los más cálidos, aunque ha admitido que es «complicado» predecir si va a ser el más cálido.
De manera concreta, ha especificado que la semana previa a Navidad será en general tranquila, con frío, aunque dentro de lo habitual, y que lo mismo se puede esperar para la semana de Navidad a Nochevieja. Lo ha hecho basándose en el pronóstico del Centro Europeo de Predicción a Plazo Medio.
Así, ha indicado que las temperaturas serán más altas de lo normal en casi toda España excepto en puntos del norte para la semana del 16 al 22 de diciembre. A su vez, también ha avanzado que parece que la semana será menos lluviosa de lo habitual en el norte en el este también en puntos de Galicia y en los archipiélagos.
En lo que respecta a la siguiente semana, la del 23 al 29 de diciembre, ha descrito que, aún «con pinzas», parece que los valores térmicos estarán en torno a los valores normales para diciembre. Aún así, se intuyen algunas manchas de temperatura algo por debajo de lo normal en zonas como el Duero y el Tajo, entre otras, lo que podría indicar nieblas nieblas que podrían persistir. Si bien parece que sería una semana con pocas lluvias, aún no queda claro lo que sucederá en el área mediterránea.
Dado que las temperaturas estarán por encima de lo normal según los pronósticos, el portavoz de AEMET ha avanzado que no parece que vaya a ser un invierno «especialmente prolijo en nevadas».
Ya más en general, Del Campo ha explicado que es probable que el 2024 acabe siendo un año de carácter húmedo, dado que a principios de diciembre ya se había superado el valor normal del año completo con 640 l/m2. Asimismo, ha añadido que aunque por ahora el 2024 no vaya a ser el año más cálido desde el inicio de la serie histórica, sí que llega al podio: es el tercero más cálido de la serie histórica desde 1961 sólo superado por 2022 y 2023.