‘dana’, ‘espóiler’, ‘teletrabajar’ o ‘chiringuito’ son algunas de las nuevas palabras incluidas en la versión electrónica 23.8 del Diccionario de la lengua española (DLE).
El director de la RAE y presidente de la ASALE, Santiago Muñoz Machado, y la responsable del Instituto de Lexicografía, Elena Zamora, han presentado este martes esta actualización, que incorpora 4.074 novedades entre nuevos términos y expresiones, nuevas acepciones de entradas recogidas con anterioridad, enmiendas a artículos ya existentes y supresiones
«No son novedades absolutas, sino que incluyen también variaciones, rectificaciones o supresiones de artículos», ha señalado Muñoz Machado, que ha indicado que las adiciones son 609, mientras que las enmiendas o ratificaciones son 1.304.
Algunas de las nuevas palabras que se incorporan al Diccionario pertenecen al mundo de la ciencia, la sanidad, el medioambiente, la tecnología, la gastronomía, la música o el deporte. Una de las palabras más novedosas es ‘dana’, que la RAE define como «depresión en niveles altos de la atmósfera, que, aislada de la circulación general atmosférica, se mueve de forma independiente y puede producir grandes perturbaciones con precipitaciones muy intensas».
La académica Dolores Corbella, presente en la rueda de prensa, ha aclarado que la forma apropiada para escribir ‘dana’ es en minúscula y ha señalado que ha tenido una evolución semejante a ‘covid’ o ‘sida’. «Al principio estaba en mayúscula porque era un acrónimo, pero hemos visto que en los corpus ya aparece en minúscula», ha detallado.
Por ejemplo, de las adiciones de palabras al diccionario aparece también ‘sérum’, ‘indie’, ‘barista’, ‘wasabi’ o ‘tutifruti’. También entre los nuevos artículos se encuentran palabras como ‘granularidad’, ‘macroencuesta’, ‘microbioma’.
Al mismo tiempo se incorporan formas complejas, aquellas compuestas por más de una palabra, como ‘centro de salud’, ‘unidad móvil’, ‘voto castigo o de castigo’, ‘zona cero’ o ‘zona de confort’.
Asimismo, la palabra ‘geriátrico’ ha dejado de ser «un hospital para tratar a ancianos enfermos», para figurar como «un establecimiento sanitario o residencia especializada en la atención y cuidado de los ancianos», tal y como ha explicado Elena Zamora, que ha agregado que el término ‘odontología’ incorpora «la noción de salud bucal que va más allá de la mera mención de las dolencias de los dientes».
A su vez, el artículo ‘enfermero’ plasma en una de sus acepciones la necesidad de una autorización legal para el ejercicio de la profesión.
Novedades
En el campo científico y tecnológico entran a formar parte del Diccionario palabras como ‘desarrollador’, ‘escalabilidad’ -también en su uso dentro de la economía-, ‘aerotermia’ o ‘driver’.
Por otra parte, esta actualización recoge una nueva acepción de ‘temporada’, en referencia al conjunto de episodios de una serie o un programa. Además, el campo de la gastronomía también tiene nuevas acepciones como ‘barista’, ‘frapé’, ‘infusionar’, ‘tabulé’, ‘umami’, ‘varietal’ o ‘wasabi’.
El mundo de la música aporta también un notable número de novedades al diccionario, tales como ‘blusero’, ‘rapear’ y extranjerismos como ‘funk’, ‘groupie’ e ‘indie’, mientras que en el campo del deporte se han incorporado ‘bicicross’ o ‘capoeira’, y otras como ‘curling’, ‘drive’, ‘fitness’ o ‘full contact’.
Otras voces que aparecen en el Diccionario son ‘atencional’, ‘desendeudamiento’, ‘dramaturgista’, ‘humanizador’, ‘musealizar’ y ‘musealización’ o ‘sociolaboral’. Asimismo, se añaden acepciones coloquiales como, por ejemplo, ‘chorreo’ en alusión a una reprimenda. En cuanto a léxico americano o relacionado con América, se ha incluido ‘azotehuela’, ‘parrillar’, ‘posnet’ o ‘pósnet’ o el extranjerismo ‘sulky’.
24ª Edición del Diccionario
Por otra parte, Muñoz Machado ha anunciado que esta actualización es la última que se realiza de la edición 23ª porque «el próximo año se empezará a preparar la 24ª edición del Diccionario», que ha avanzado que se presentará en 2026.
«En 2026 será la versión digital definitiva. La versión 23 se acabó. Esta es la última. Necesitamos concentrar a los equipos de la Academia en la preparación de la 24ª edición y eso nos obliga a no trabajar más en la 23ª edición», ha afirmado Muñoz Machado.
El director de la RAE ha comentado que su voluntad es que «también se publique en papel», aunque aclara que será «mucho más corta» porque «ya no se venden los diccionarios en papel».
«Será mucho más corto de lo que era tradicionalmente. Hemos llegado a vender de una edición del diccionario hasta un millón de ejemplares. Pero eso ya no existe. A partir de ahora, una edición modesta para que los que somos coleccionistas de papel», ha confirmado.
En el Diccionario actual hay 94.000 entradas y Muñoz Machado ha reconocido que a la RAE no le da «pánico» la aparición de otras palabras procedentes de otros idiomas. «El español ha sido siempre una lengua de tipo mestiza y ha incorporado con facilidad términos procedentes de otros idiomas», ha remarcado.
Al respecto, Dolores Corbella ha señalado que la edición 24ª será «un diccionario integral panhispánico». «Estamos en una época de transformación. Vamos hacia un diccionario integral panhispánico, es decir, un diccionario que firma toda las academias americanas. Tenemos la gran suerte de que usamos una lengua que hablan 600 millones de personas y entonces la gran variedad que existe en todos los ámbitos, en todas las regiones, en todos los países donde se habla español, tiene que quedar reflejada en el diccionario», ha manifestado la académica.
Además, se ha presentado el rediseño de la página web del diccionario de la academia. Entre las novedades, desde este martes se ofrecerá de manera cotidiana ‘La palabra del día’, que se ha estrenado con el vocablo ‘civilización’.