La Academia Malagueña de Ciencias celebrará este próximo jueves 28 de noviembre, a las 18.30 horas, una mesa redonda en el salón de actos del rectorado de la Universidad de Málaga bajo el título: «El Parque Tecnológico de Andalucía. Su relación con la Universidad y la ciudad de Málaga». Esta sesión pública, organizada por la sección de Ciencias Tecnológicas de la Academia Malagueña de Ciencias, contará como moderadores con los académicos Rafael Martín Delgado y Rafael Morales Bueno.
En esta mesa redonda participarán además diversas personalidades vinculadas a las instituciones que han estado relacionadas con su creación y gestión y que, en consecuencia, tienen un profundo conocimiento de la misión que cumple este núcleo de dinamización científica y tecnológica de la industria de Andalucía. Las tres personalidades que configuran la mesa son: Felipe Romera Lubias, ingeniero de Telecomunicación y director Gerente del PTA. Es Doctor Honoris Causa por la Universidad de Málaga; Javier Pérez de la Fuente, arquitecto. Jefe del Departamento de Arquitectura e Infraestructuras del Ayuntamiento de Málaga, y Javier López Muñoz, Doctor en Ingeniería Informática. Catedrático de Ingeniería Telemática de la Universidad de Málaga.
La implantación en Málaga del Parque Tecnológico -ahora Málaga TechPark (MTP)-, acordado entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga en el año 1988 e inaugurado en 1992, ha supuesto un gran valor económico y laboral para la ciudad. La elección de Málaga y localidades cercanas como lugares de residencia de las personas que trabajan en el Parque, ha llevado consigo un importante impulso para el desarrollo de estas localidades. Su creación ha influido de manera notable en la universidad, que, ante la demanda de titulados por parte de las empresas instaladas en el MTP, generó nuevas disciplinas científicas y técnicas. La relación entre el MTP y la universidad ha sido muy fructífera, determinando la elaboración de planes académicos adecuados a la demanda existente. La integración del MTP en la ciudad obligó a resolver algunos problemas de conexión con la capital. Los Planes de Ordenación del Territorio han debido adaptar sus previsiones a esta nueva realidad. Sin embargo, el desplazamiento de las personas que trabajan en el MTP desde sus lugares de residencia, sobre todo desde la capital, se ha ido resolviendo más lentamente de lo que hubiera sido deseable. Así pues, el MTP se configura como un entorno científico, cultural y recreativo con gran sinergia.
