Arrancan las obras de la segunda fase del Desfiladero del Tajo de Ronda (Málaga), una pasarela de 500 metros que completará este ambicioso proyecto que permitirá disfrutar de este paraje desde una vista previamente inaccesible. La Diputación financiará con 682.000 euros el 50% de esta actuación, ascendiendo la inversión total del ente supramunicipal (incluyendo la primera fase que se encuentra operativa) a 814.292 euros. Se espera que las obras finalicen entre seis y ocho meses.
Así lo ha dado a conocer el presidente de la Diputación provincial, Francisco Salado, que ha presentado el inicio de estas obras junto a la alcaldesa de Ronda, María de la Paz Fernández.
Salado ha definido la finalización de este proyecto, prevista para 2025, como «uno de los momentos históricos de Ronda, que va a seguir creando la marca Ronda, la marca Málaga y la marca Andalucía». Por lo que ha felicitado a la alcaldesa por «seguir soñando y transformando esta bella ciudad que es Ronda, creando una singularidad, una exclusividad de un producto turístico que si quieres disfrutarlo, quieres verlo, no hay otra oferta en el resto de la provincia ni en el resto de Andalucía».
En este sentido ha hecho referencia a los elementos que aúna Ronda y que invitan a su visita como «el paisaje, el Puente Nuevo, el casco histórico, los baños árabes, las bodegas y ruta del vino, La Almazara, el mundo del toro y del flamenco», a lo que se suma este recorrido por la Garganta del Tajo.
Por tanto, esta obra, adjudicada a la empresa Sando, que fue la acometió la rehabilitación del Caminito del Rey, está valorada en 1.087.426 euros. Con una anchura de 1,2 metros, la pasarela se instalará a una altura de tres metros de altura sobre el cauce del río Guadalevín, para salvar su crecimiento en caso de lluvias torrenciales.
La alcaldesa de Ronda, María de la Paz Fernández, ha resaltado que para la ciudad «hoy es un día histórico, porque comienzan los trabajos de un sendero único, que permitirá disfrutar de nuestro principal monumento natural desde una perspectiva nunca antes vista».
En este sentido, ha querido agradecer «la colaboración constante y permanente de la Diputación Provincial en un proyecto como éste, que estamos seguros que supondrá un atractivo de interés para toda Málaga y Andalucía, como prueban las más de 75.000 visitas que hemos registrado en la primera fase desde su apertura el pasado mes de abril».
Los trabajos de la segunda fase comenzarán en la base del puente Nuevo y trascurrirá hacia el este, desembocando en la zona de los baños árabes, junto a la ermita de San Miguel, en un recorrido de 500 metros de longitud a los que se suman los 200 ya abiertos al público de la primera fase.
Salado y Fernández han recordado que esta primera fase estuvo cofinanciada con 131.450 euros de fondos del Plan de Asistencia Económica Municipal de la Diputación, así como con aportaciones de la Junta de Andalucía y del propio consistorio.
La actuación permitió acondicionar y dotar de medidas de seguridad un camino que ya existía entre la plaza de María Auxiliadora, conocida como plaza del Campillo, y la base del Puente Nuevo. Se crearon varios miradores y se rehabilitó un inmueble conocido como ‘Casa Manolillo, como centro de interpretación del espacio.