El Consejo de Ministros ha aprobado este martes la actualización de sus previsiones de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), que sitúan el avance de la economía españoles en el 2,7% para 2024, tres décimas más; en el 2,4% para 2025, dos décimas más, y en el 2,2% para 2026, frente al 2% comunicado el pasado mes de julio.
Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, el titular de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, ha explicado que estas nuevas estimaciones recogen la «sólida» evolución de la economía española que registra un crecimiento «más fuerte, más equilibrado y más responsable».
«La economía española está saliendo más fuerte en la recuperación, ya en el año 2023 por encima de nuestros principales, pese a haber sido la más afectada de entre las mayores economías europeas, y con unas previsiones hacia adelante que nos sitúan creciendo más fuerte y más rápido que ellos y, por lo tanto, abriendo aún más esta brecha», ha resaltado.
Esta mejora del escenario macroeconómico hasta 2026 también responde a la revisión al alza realizada recientemente por el Instituto Nacional de Estadística (INE) del crecimiento del PIB en el periodo 2021-2023, que ha supuesto un incremento adicional del crecimiento acumulado de 1,1 puntos porcentuales entre 2019 y 2023 y un incremento de más de 36.400 millones de euros del PIB nominal, ha explicado Cuerpo.
Esta revisión también tiene impacto en la ratio de deuda pública sobre PIB, según ha resaltado el ministro, pues, con los nuevos datos, la economía española habría alcanzado ya, en el año 2023, el objetivo que se había previsto para 2024 de llegar al 105% de deuda sobre el PIB, adelantándose así un ejercicio.
«Son datos que son un elemento de confianza hacia adelante en cuanto a la responsabilidad con la que se ha comportado el Gobierno en materia de actuación presupuestaria, incluso en unos años de ausencia de reglas fiscales a nivel europeo, con una reducción continuada de la deuda», ha remarcado.
Consumo privado
Según Economía, el consumo privado será uno de los principales motores del crecimiento, con avances del entorno del 2% a lo largo de todo el periodo, gracias al «buen comportamiento» del mercado laboral. En concreto, se estima que el consumo privado aumentará un 2,2% este año, un 2,1% en 2025 y un 2% en 2026.
En lo que respecta al gasto público, el nuevo escenario macro apunta a que se incrementará un 1,8% este año y un 1,6% tanto en 2025 como en 2026, lejos del avance del 5,2% registrado en 2023.
De hecho, el Gobierno estima que se crearán alrededor de 500.000 empleos al año, se superarán los 22 millones de ocupados en 2025 y la tasa de paro seguirá bajando, hasta situarse en el 11,2% en 2024, el 10,2% en 2025 y el 9,7% en 2026, tasas muy similares a las comunicadas el pasado mes de julio.
El aumento de la ocupación previsto por el Gobierno será del 2,6% este año, del 2,5% en 2025 y del 2,2% en 2026. Este crecimiento, ha explicado el Ministerio, vendrá acompañado de una mejora de la productividad por hora todos los años, y del aumento de la remuneración por asalariado, que crecerá por encima de la inflación.
Asimismo, el Gobierno ha revisado al alza el crecimiento de la inversión, como reflejo del impulso y aportación positiva del Plan de Recuperación. Así, estima ahora que la inversión aumentará un 3,3% en 2024, un 5,8% en 2025 y un 4,9% en 2026.
«No sólo es el impacto del Plan de Recuperación y el apalancamiento que estamos consiguiendo de inversión gracias a ese enorme esfuerzo del Plan de Recuperación, en gran medida con un vector verde y de descarbonización, sino también la expectativa de recuperación de la inversión en construcción de la mano de las políticas de recuperación de esa oferta de vivienda, en particular en la de alquiler asequible que prevemos para los dos próximos años», ha subrayado.
Sector Exterior
Al mismo tiempo, el Ejecutivo prevé que se mantenga el dinamismo del sector exterior por el tono positivo de las exportaciones, que avanzarán un 4,2% en 2024 para moderar después su ritmo de crecimiento hasta el 2,4% en 2025 y hasta el 2,3% en 2026. Las importaciones, por su parte, se incrementarán un 2,6% este año y acelerarán su crecimiento al 3,6% en 2025, mientras que en 2026 subirán algo menos, un 3,1%.
Así las cosas, el Gobierno calcula que la demanda nacional aportará dos puntos al crecimiento del PIB de 2024, mientras que la externa contribuirá con siete décimas. En el caso de 2025, todo el crecimiento se apoyará en la demanda interna, pues el sector exterior restará tres décimas al PIB, y lo mismo en 2026, cuando la demanda externa tendrá una contribución negativa de dos décimas.
El nuevo cuadro macro contempla un crecimiento del PIB nominal del 5,9% para este año, del 5,1% para 2025 y del 4,7% para 2026, frente al incremento del 9,1% experimentado en 2023, y una subida del deflactor del PIB del 3,1% este año, del 2,7% para el próximo ejercicio y del 2,4% para 2026.
«Hemos empezado 2024 con el mantenimiento del buen pulso económico que ya llevábamos en 2023, con buenas noticias económicas que hacen que nosotros, pero el conjunto de analistas, estemos actualizando nuestras previsiones al alza. Y lo que prevemos, más allá del 2024, es que sigamos creciendo hacia adelante», ha destacado.