Presentación de la campaña "Paseos sin Rastros"

En marcha la campaña ‘Paseos sin Rastros’ para concienciar sobre la importancia de la recogida de excrementos de mascotas

El edil de Residuos Sólidos Urbanos y Medio Ambiente, Juan Olea, presentó en la mañana de ayer la iniciativa ‘Paseo Sin Rastros’, que pretende concienciar a la ciudadanía que tiene mascotas, fundamentalmente perros, de que mantenga la atención y no de lugar a la relajación en la recogida de excrementos depositados en vía pública de sus canes, así como la necesidad de diluir las micciones de las mascotas en la calle para mantener la ciudad limpia los 365 días al año, fundamentalmente, limpiar las esquinas y proximidad a contenedores.  

Olea ha recordado que durante los meses estivales es notorio el incremento de población por todo el municipio y muchas de las personas que nos visitan, “nos visitan con sus mascotas”, siendo necesario incrementar iniciativas concienciadoras de este tipo para mantener una imagen que sea acorde a la que aspira lograr y en la que trabaja el Ayuntamiento de Benalmádena.

Esta iniciativa “viene a recordar a nuestros vecinos y visitantes lo importante que es colaborar en la limpieza de la ciudad y porque no hacerlo correctamente, no solo perjudica a la imagen de Benalmádena, sino también puede acarrear sanciones de 750 a 1500 euros por infracción, cantidades muy importantes que pueden afectar al bolsillo de nuestros vecinos o turistas, siendo esta una causa más que motiva la necesidad de colaboración, siendo prioritario siempre para el Ayuntamiento que se logre la concienciación y el buen uso de la vía pública al objeto de evitar cualquier tipo de multa”. 

En Benalmádena, pasear al perro con bolsa de plástico y botella de agua jabonosa en mano es una obligación desde que se modificó la ordenanza municipal en 2019 y a la que luego siguieron otros municipios. Los dueños que no cumplan con la normativa se enfrentan a sanciones de hasta 700 euros. Además, existe también la obligación de registrar el perfil genético de la mascota, no sólo para poder identificar los excrementos que se dejen en la vía pública, sino también para evitar el abandono de animales. Tras el registro, el dueño recibe una chapa identificativa que el animal debe llevar en su collar.

Comparte esta noticia